CAPÍTULO 7: CARLA
Carla era una chica encantadora, bien educada y de familia adinerada.
Tenía un cuerpo perfecto, moldeado a base de hacer varios deportes.
Y, además, era muy guapa.
Vamos, la niña de los ojos de sus padres.
Pero tenía un defecto...
Dos, mejor dicho.
El primero, haber hecho caso omiso de sus padres y, en vez de Ciencias Económicas había preferido estudiar Ciencias Sociales y Jurídicas.
No era un defecto tan grave, puesto que también daba para un oficio con buenos ingresos.
Pero, el segundo, sí lo era: Estaba enamorada locamente de un chico de su clase.
No sería problema si el joven hubiera sido de su estatus social, pero todo lo contrario.
Vivía en un barrio de esos que suelen tener mala fama.
Por suerte, el chico parecía no hacerle nada de caso a Carla, pero ella era muy tozuda y sus padres tenían miedo de que al final el joven cediera.
Lo que no sabían, era que cuando lo hiciera, iba a ser peor para su hija de lo que ellos pensaban...
La chica, cogió su smartphone y le envió un mensaje de mensajería cifrada:
"Joan, estoy sola en casa y ponen en un canal de pago la última de Fast & Furious... ¿Te apetece pasar venir?"
Respuesta: "¿No tienes más chicos a los que incordiar? ¡Al final, te voy a tener que bloquear!"
Carla, se quedó sin saber que hacer.
No estaba acostumbrada a que le negaran nada hasta que empezó la universidad.
Había salido con todos los chicos que había querido, y siempre conseguía de ellos lo que quería.
Hasta que se cansaba y los dejaba, se podría decir que para ella eran lo mismo que un kleenex, pañuelos de papel de usar y tirar.
Pero Joan le estaba resultando un chico difícil y eso es lo que les gustaba de él.
Tanto, que había llegado a enamorarse.
A pesar de vivir en un barrio de diferente estatus social, el chaval tenía mucha cultura y era educado.
Últimamente, algo en él había cambiado y estaba mas arisco, pero Carla pensó que tal vez se debería a algún problema familiar.
Como ella veía que con indirectas hasta ahora no había obtenido resultados positivos, decidió ir directa al grano:
"Si vienes a mi casa, en la que sólo estoy yo, haré lo que tú quieras, incluso echar un polvo en la cama de mis padres"
A Joan se le encendió una bombilla en su cerebro, eso era muy morboso y, además, Carla le había dicho que haría lo que él quisiera...
CAPÍTULO OCTAVO: Sexo y algo mas
